Hoy en día es muy común que más mujeres estén buscando ser madres por primera vez después de los 30 años y aunque pareciera que hay más riesgos, con los cuidados prenatales adecuados es posible que den a luz a bebés sanos sin problemas de salud para ninguno de los dos.
Aunque los peligros son menores, las probabilidades de Síndrome de Down o problemas congénitos en los bebés, así como los abortos espontáneos aumentan con la edad.
La edad ideal para tener hijos es entre los 22 y los 30 años, pero si has decidido tener bebés después de los 35, es importante que tomes esto en cuenta:
- Podrías tardar más tiempo en quedar embarazada, ya que entre los 35 y 39 años hay menos óvulos en tus ovarios y de menor calidad. Si después de 6 meses no has podido quedar embarazada, es importante consultar a tu médico.
- Tienes más probabilidades de un embarazo múltiple. Esto se debe a que los cambios hormonales propios de la edad pueden provocar que se desprendan 2 o más óvulos al mismo tiempo.
-Hay más probabilidades de tener diabetes gestacional, lo que puede provocar un parto prematuro, presión arterial alta y complicaciones después para el bebé. Es por eso que en las mujeres mayores de 35, llevar una dieta baja en azúcar y el ejercicio son necesarios durante el embarazo.
- La presión arterial alta durante el embarazo es más frecuente en mujeres mayores, si así sucede, el cuidado debe ser riguroso, tener más citas con el médico y probablemente adelantar el parto.
- Un bebé con bajo peso al nacer o prematuro.
- Más probabilidades de tener una cesárea, ya que con la edad pueden haber problemas que impidan que se pueda tener un parto natural, como presentar placenta previa.
- Abortos espontáneos, pérdida del embarazo y muerte fetal son otras complicaciones que con la edad pueden ocurrir con más frecuencia, debido a la baja calidad de los óvulos o a enfermedades previas, así como problemas por la presión alta. El cuidado de tu médico debe ser más riguroso las últimas 6 semanas del embarazo.
Es importante llevar un cuidado prenatal muy completo, hacerte estudios y acudir a los ultrasonidos regularmente para descartar cualquier tipo de problema que tú y tu bebé pudieran tener.
Fuente: Mayo Clinic