Consentirte es una parte esencial de tu proceso como mamá. En cualquier etapa de tu vida como madre, es súper importante que no olvides cuidarte y ser noble con tu cuerpo. Es normal que pases por varios cambios emocionales y físicos, desde que decides embarazarte hasta que tienes a tu querubín. Tienes que recuperar las fuerzas que vas dejando en el camino. Descanso y una buena nutrición son elementos básicos para que estés en optimas condiciones para ti y tu familia.
Descanso:
Cada vez que puedas toma siestas para recuperarte, te sorprenderá el poder que tienen en tu cuerpo. Aunque sean 20 minutos, son valiosos. El sueño es elemental para que tu cuerpo esté en óptimas condiciones.
Nutrición:
Tu cuerpo ha sufrido infinidad de cambios, no te olvides de consentirte y ¿qué mejor forma que comiendo rico y saludable?
Come verde, trata de evitar cocer las verduras para que no pierdan todas su propiedades.
Come proteína, esta es necesaria para recuperarte cuando estás amamantando.
Consume alimentos con fibra, frutas como naranjas, toronjas, etc.
Las legumbres serán tu gran aliado para una excelente alimentación. Cocínalas a tu gusto.
Diversión:
Realiza actividades para tu alma, ve una película, lee, sal a cenar, es importante que salgas y te distraigas para que recuerdes que antes que todo también eres persona. Y mientras mejor esté tu persona, mejor vas a poder atender a tu nueva familia.